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[Análisis] Senran Kagura Peach Beach Splash
Marvelous vuelve a la carga con Senran Kagura mutando del género Hack & Slash al Third Person Shooter con Peach Beach Splash

Senran Kagura es una conocida saga Hack & Slash que se labró una reputación un tanto polémica por su énfasis en la sexualización de los personajes y la apuesta directa al género de manga/anime “ecchi” que consiste en la exageración de tópicos sexuales para generar situaciones de comedia picante.

Con hasta 7 juegos en sus espaldas, Senran Kagura es una saga reciente pero con una línea productiva muy marcada. Empezando en portátiles como un Beat Em Up de scroll lateral en 2011 se ha ido puliendo hasta convertirse en un exponente del Hack & Slash con una maestría jugable muy respetable.

Con su último título, sus creadores (Tamsoft amparados por Marvelous) han decido ir más allá y volcar su licencia a un nuevo género en auge: Los shooters cooperativos de objetivos pero aportando el grano de picardía que es marca de la casa y teniendo como núcleo el agua como elemento vehícular de toda la experiencia.

 

Las batallas contra Jefes suponen un refresco a las batallas, algunos proponen mecánicas curiosas y pueden ser realmente duros de derrotar

Historia

 

Senran Kagura está protagonizada por Kunoichis (mujeres ninja o shinobi) que estudian en una academia ancestral para mejorar sus habilidades. En esta ocasión, varios equipos de esta academia situada en Japón han sido invitados a reunirse en una isla tropical ¿Con qué objetivo? Participar en un torneo de pistolas de agua con la promesa de que si ganan, se les concederá un deseo que sobrepase los límites de lo imposible. A priori, a todos los equipos les parece una tomadura de pelo pero en seguida se darán cuenta de que aquí hay gato encerrado.

El Modo Historia se divide en 4 campañas determinadas por cada uno de los equipos implicados, cada campaña está distribuida en 10 niveles de batallas intercalados con escenas en modo Visual Novel donde se irá desentrañando los sucesos de la historia. El desarrollo de las campañas se hace bastante ameno, seremos partícipes de las motivaciones de cada equipo, profundizaremos en las relaciones de los integrantes y seremos testigos de que, pese a haber muchos personajes que en primera instancia parecen clones unos de otros, gozan de personalidades muy marcadas y un recorrido narrativo bastante interesante en algunos casos.

Cada campaña finaliza con un nivel final donde tendremos que luchar contra un jefe y nos ha sorprendido que estos sean bastante diferentes según la campaña que estemos jugando. Algunos son rivales mastodónticos y serán capaces de arrancarnos alguna carcajada inesperada.

En términos prácticos la historia cumple con nota en su afán de entretenernos. No es muy profunda y es imposible que se tome en serio así misma con tanto chiste malo ecchi y situaciones absurdas, pero es inevitable reírnos de vez en cuando y la subtrama oscura que tiene de fondo se sigue con interés.

 

El juego parodia elementos de nuestro tiempo. Ese New Tube es un tanto sospechoso ¿No?
El juego parodia elementos de nuestro tiempo. Ese New Tube es un tanto sospechoso ¿No?

Gráficos

 

El juego corre con el Shinobi Engine, un motor gráfico bastante usado en juegos de corte manga/anime y nacido con la intención de correr en Playstation Vita. Su extrapolación a Playstation 4 está haciendo bastantes maravillas en términos de optimización, dando lugar a modelos que se ven realmente bien a resoluciones Full HD o 4K y con una fluidez placentera como hemos podido ver en juegos como Digimon Cyber Sleuth.

En el caso de Senran Kagura Peach Beach Splash el resultado es similar. Los diseños de Nan Yaegashi se ven estupendamente bien con este motor y la fluidez de las batallas, a 60 cuadros por segundo con alguna caída a 30 cuando los efectos se amontonan en pantalla, es de buena nota. A nivel artístico es un juego que quizás le falte una chispa de personalidad, los diseños de los personajes se ven poco originales y muy similares entre sí en proporciones corporales, los escenarios parecen “remixes” unos de otros pese a la cantidad de elementos que muestran o el énfasis en la verticalidad de los mismos y las animaciones, aunque notables en el terreno jugable, se ven pobres y algo robóticas en las escenas VN.

Cierto es que en otras áreas está muy trabajado. Véase el agua y su comportamiento, los efectos visuales de la misma según el arma que la dispare o incluso los destellos lumínicos de las habilidades que también gozan de un buen nivel. También hay detallitos interesantes, como que la ropa de las protagonistas se rompa si reciben un crítico o el uso de la cámara en las escenas de golpes finales.

 

Sonido

 

La saga nunca se ha caracterizado por ofrecer piezas que deslumbren o nos queden para el recuerdo. Con Peach Beach Splash tampoco nos llevaremos ningún tema para el reproductor dado lo genéricos que son. Que conste que con esto no estamos diciendo que sea una banda sonora mala si no que más bien cumple en su intención de ambientar las contiendas acuáticas y enfatizar el ambiente picante del programa, pero que no llega más allá. Es cierto que el tema de presentación está bastante bien (Rainbow Kiss), aunque solo lo escucharemos en el opening de animación una vez ejecutemos el videojuego.

La mayoría son temas que mezclan composiciones electrónicas animadas con algún toquecillo roquero animado.

En cuanto al doblaje, nos llega en japonés y el nivel es perfecto. Cuenta con un repertorio de seiyuus (dobladores japoneses) muy profesional para la mayoría de las Kunoichis y muchas voces nos sonarán de oírlas en animes famosos.

Los efectos de sonido son los que hacen que se lleve él premio. Son geniales, acompasan bien toda la temática acuática de las batallas, los efectos de las cartas están bien definidos para asociar el sonido a cada habilidad sin necesidad de pararnos a ver cuál es y donde más se han esmerado, por chorrada que pueda ser, es en el sonido del movimiento de los pechos de las protagonistas, amparando las ya de por sí situaciones disparatadas que se suceden en el programa.

 

A parte de enfrentarnos a otros equipos de Kunoichis, habrá niveles donde se nos ataque con minions, torretas de agua y hasta bombas.

Jugabilidad

 

Curioso el cambio que dieron a la saga con este spin-off. Como os contamos en la introducción del análisis, Senran Kagura se caracterizó más por ofrecer propuestas de “yo contra el barrio” en vez de shooters tan característicos como este.

Peach Beach Splash es una apuesta arriesgada de Marvelous por cambiar de género y de bases pero en esta ocasión, el riesgo ha tenido su recompensa.

Empecemos hablando de los controles. Es típico encontrar en el mercado multitud de thirds person shooters con esquemas de control y movimiento un tanto… ortodoxos y clasistas. Peach Beach Splash decide no innovar pero sí centrarse en copiar los elementos más modernos de los últimos años. Por ejemplo, las habilidades son propias de juegos pertenecientes al género de los MOBA, la kinestética de los disparos recuerdan muchísimo a Mario Sunshine, la distribución de los escenarios y posicionamiento hace reminiscencia a Splatoon, el movimiento tridimensional es sacado de obras como Halo 5, la resurrección de un Gears of War y el esquema de control nos hace sentir a ciertos personajes de Overwatch, etc.

Todo en este sentido se siente bastante sólido y la respuesta del mando es innata. Quizás haya alguna decisión cuestionable, como la inclusión de auto-apuntado que reduce la complejidad de los tiroteos una barbaridad o que los personajes tarden lo suyo en levantarse una vez nos asestan un golpe crítico (siempre y cuando no pulsemos el botón de dash en el momento idóneo), pero a grandes rasgos el trabajo hecho aquí es encomiable.

Las contiendas se realizan en equipos de 5 chicas contra otras 5 chicas, las cuales podremos profesionalizar en determinados grupos de armas y habilidades para tener un equipo competente y adecuado a cada situación.

El armamento y las habilidades gozan de una variedad y complejidad magnífica. Armas tendremos hasta 10 tipos diferentes (escopetas, pistolas, armas dobles, gatlings, lanzagranadas, lanzamisiles, rayos de presión, rifles semiautomáticos, hidrolimpiadoras y rifles de francotirador) todas con dos tipos de disparo y una mochila de propulsión que variará su utilidad. En cuanto a las habilidades, estas se diseminan por cartas que podremos coleccionar y equipar hasta un máximo de 5 con multitud de propiedades diferentes. Tanto las armas como las habilidades se pueden mejorar aprovechando aquellas cartas que tengamos repetidas, ya que el método de obtención de nuevo equipamiento se hará a través de sobres, adquiribles mediante créditos del juego o ganando contiendas, donde nos tocarán objetos al azar, inculcando al juego a la moda reciente de las cajas de botín.

Otro punto fuerte del programa es la personalización, podremos “tunear” a todas las kunoichi de cabo a rabo, trastocando cosas como los trajes, bañadores, peinados, accesorios e incluso los colores. Junto con la posibilidad de mejora anteriormente mencionada, el nivel de personalización del programa asciende a niveles estratosféricos. Será difícil, muy difícil ver un equipo de Kunoichis igual y con las mismas habilidades tanto en terreno offline como online.

 

Con 40 personajes seleccionables de base más otros tantos desbloqueables jugando, se suman hasta 8 más por DLC ¡Se nos va ir el tiempo leveando shinobis!

Duración

 

La verdad es que el título tiene una oferta de modos muy interesante.

A nivel offline tenemos el citado Modo Historia cuyas 4 campañas nos durarán entre 2 y 3 horas cada una en función de la dificultad que juguemos. También disponemos de misiones sueltas donde jugaremos con personajes y modificadores de batalla predefinidos y los torneos, diseminados en 4 copas con una dificultad considerable y que sirve de excusa al juego en lo referente a grindear cartas y subir de nivel el equipamiento, ya que las rondas se irán haciendo cada vez más duras e interesantes.

Sin olvidar modos secundarios como la tienda, donde gastar nuestros créditos en sobres de diferentes temáticas, accesorios, trajes, canciones e ilustraciones y el menú de personalización, el lugar donde echaremos más horas si somos quisquillosos con las “pintas” de las protagonistas dada la gran cantidad de opciones que ofrece y que mencionamos con anterioridad. En este modo también se encuentra la funcionalidad de “Shower”, un visualizador de modelos donde podemos hacer capturas a las kunoichis en diferentes poses sugerentes e incluso hacer el cafre con sus senos o ducharlas con patos de goma.

A nivel online tenemos la posibilidad de escoger servidores locales (Europa, en nuestro caso) o globales para aumentar el número de jugadores disponibles sacrificando calidad de conexión. Los modos que tenemos van desde partidas para subir rango donde podemos optar por contiendas de 3 vs 3 o 5 vs 5 o las partidas libres sin rango donde podemos añadir modificadores y gestionarlas con mayor libertad. Lo malo de la vertiente multijugador es que filtra a los jugadores según los DLC’s que tengan comprados, haciendo la búsqueda de partidas una tarea ardua e infernal donde podremos tomarnos varios cafés esperando que encuentre alguna.

En cuanto entramos en partida, los servidores (los globales, locales no hemos encontrado a nadie con quien jugar) la calidad se veía demasiado mermada por tirones, rollbacks y congelaciones en pantalla. Marvelous debería cambiar las políticas en cuanto a sus DLC’s como llave para entrar al online ya que será bastante difícil que haya jugadores que coincidan entre sus casi 200 contenidos descargables que van desde cosméticos, packs de cartas exclusivos y hasta personajes nuevos pertenecientes a sagas como Dead Or Alive o Ikkitousen.

Así a todo, la suma de horas que el programa nos tendrá pegados a pantalla puede superar la barrera de las 100. Hay mucho contenido que desbloquear en términos de personalización y como decimos, los torneos nos exigirán ir bien preparados si no queremos que nos ahoguen en la piscina o nos quiten el bañador a golpe de chorro de agua.

 

 

Conclusiones

 

Senran Kagura Peach Splash es la apuesta por Marvelous de expandir los géneros de su encorsetada saga. El juego resulta en un shooter muy divertido, competente en lo jugable con centenares de elementos para desbloquear y mejorar, un buen repertorio de modos para perderse tanto a nivel offline como online y una capacidad de personalización profunda.

Puede que su sentido del humor tan exagerado en la sexualización disguste a más de los que puede contentar, la falta de originalidad en sus mecánicas (aunque estas estén muy pulidas y sean complejas) y los problemas persistentes en sus modalidades online puedan ensombrecer la experiencia, pero si ya eres fan de la saga, disfrutas del ecchi como un niño o te gustan los shooters con elementos de MOBA, Peach Beach Splash te recibirá con los brazos abiertos.

 

Este análisis ha sido posible gracias a una copia para PlayStation 4 que nos ha cedido Marvelous!, ¡esperamos que os guste!

  Senran Kagura es una conocida saga Hack & Slash que se labró una reputación un tanto polémica por su énfasis en la sexualización de…

Análisis Senran Kagura: Peach Beach Splash

Historia - 7.5
Gráficos - 8
Sonido - 7
Jugabilidad - 9
Duración - 8.5

8

Pese al cambio de género radical, los fans de Senran Kagura pueden estar contentos, Peach Beach Splash es un juego notable con mucho contenido que disfrutar.

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Por Kosack

Jugador desde hace más de 20 años que disfruta viciando y escribiendo a partes iguales.Además de los videojuegos, donde profeso devoción a los J-RPGs y juegos de acción, me encanta mastear rol de Cyberpunk 2022, bajar litros de cerveza como un día sin pan y leer de forma compulsiva cómics de toda índole.Además, tengo un canal de YT donde me gusta analizar juegos, cómics y series estudiando diferentes enfoques.

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