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Imaginaros que X compañía coge uno de sus títulos más exitosos, con un potencial gráfico que hace caernos literalmente de la silla incluso habiendo pasado 3 años de su lanzamiento -y ya que estamos decir que actualmente nada tiene que envidiar a los juegos actuales-, con mecánicas totalmente innovadoras, miles de posibilidades a nuestro alrededor y lo convierte en una especie de DLC o juego secundario al estilo Battle Royale todos contra todos.

Esto es justo lo que nos ofrece Bad Blood, una expansión independiente del juego original Dying Light que nos sitúa en el propio mundo del juego con la misión de recoger el mayor número de muestras infectadas posibles. Partidas multijugador de hasta 12 jugadores los cuales deberán matarse entre si, pues solo el último en pie tendrá la oportunidad de escapar en helicóptero de esta zona completamente infectada llena de zombies, bandidos y demás monstruosidades.

Pero vayamos por partes, pues lo primero de todo será personalizar a nuestro superviviente:

Contaremos con arquetipos de corredor e ingeniero entre otros, aunque algo para nada relevante, pues no afecta a nuestra manera de jugar, simplemente a nuestra apariencia la cual podremos modificar a nuestro gusto tanto ropajes como la máscara. Físicamente no hay disponible ningún tipo de personalización y además se echa en falta algún personaje femenino, aunque esperamos que sea porque vayan a utilizar un sistema parecido al de juegos como Fortnite con skins añadidas en el tiempo.

Tanto la ropa como los atuendos, e incluso nuevos diseños para las armas y avatares de jugador pueden conseguirse gracias a los cofres de recompensas que recibiremos al subir de nivel, aunque también pueden comprarse sin ningún problema en la tienda del juego a cambio de la moneda establecida dentro. Decir que, personalmente, me ha impresionado bastante la gran variedad de diseños que tenemos a nuestra disposición sin contar los que, seguramente, añadirán más adelante.

Visualmente no defrauda. 

Como ya os he citado al principio, sacado del propio motor gráfico del juego original, Dying Light: Bad Blood sorprende gratamente con un aspecto visual que sigue siendo trabajado y que no causa ningún inconveniente pese al tratarse de un Battle Royale multijugador lleno de acción y enemigos. El icónico parkour que acompaña los movimientos de nuestro personaje es totalmente fluido, sin bajadas en los fps.

En resumidas cuentas, cumple con lo que promete y la única pega que le pongo es que, en ocasiones, denota una sensación de menor, digamos ‘resolución’, algo que puede ser debido a que quieran abarcar un mayor número de jugadores con un menor nivel de requisitos para jugarlo en PC, aunque puede que esto cambie tras su lanzamiento oficial, pues de momento contamos solo con el acceso anticipado.

Supervivencia desde el primer minuto.

Contamos con 3 modos de juego, Casual, el perfecto para jugar con amigos, Normal, con hasta 12 jugadores aleatorios y Ranked, un modo competitivo aún no disponible en el que solo los mejores jugadores conseguirán los primeros puestos. Sea cual sea el modo que escojamos, el survival-horror tan característico en el título se palpa en el ambiente desde el primer minuto: nos dejarán caer en cualquier zona del mapa, sin poder escoger nosotros, y tendremos que dejarnos las piernas por ser los primeros en recoger todo tipo de recursos como armas, escudos, mejoras de armas, granadas, botiquines, etc. o, si tenemos suerte, conseguir alguno de los maletines con recursos que suelta a veces nuestro apoyo aéreo. 

Cada arma será clasificada en tres tipos de calidad o nivel diferenciadas por colores, normal-raro-épico y, como es de esperar, las épicas serán las que más causen daño a nuestros enemigos. Además, si somos buenos exploradores del entorno, podremos conseguir alguna mejora de arma como flechas congelantes, que además de causar daño, aturdirán a nuestro contrincante.

Como ya he dicho, el objetivo de cada batalla será recoger muestras, estas muy frecuenciadas por toda clase de zombies corredores, escupidores e incluso élites que, nos costarán el triple de tiempo para aniquilar, aunque las muestras que custodian son bastante más abundantes que las normales. Todos ellos no nos serán un gran reto, pero si que se volverán bastante molestos cuando nuestra vida corra peligro frente a los demás jugadores, al igual que los bandidos que, mayoritariamente nos esperan en los tejados de los edificios.

Pero no solo podremos conseguir nuestro objetivo encontrando estos núcleos; si acabamos con los jugadores rivales podremos obtener todos sus objetos, incluidas las muestras. Cada una de estas muestras nos otorgará experiencia, la cual nos servirá para subir de nivel y os preguntaréis, ¿para qué nos sirve esto? Pues, además de aumentar nuestra vida y nuestra agilidad, resulta que cuando alcancemos el nivel 5, vendrá a por nosotros el ya citado helicóptero, antes no.  A través de un pequeño ranking situado en la parte superior izquierda, podremos observar los tres primeros jugadores de la partida que más nivel y experiencia posean. Si contamos ya con este nivel, tendremos que ir rápidamente hacia la recogida y, tras 30 segundos, si nadie reclama la victoria nos podremos marchar pero, de lo contrario, tendremos que acabar con cualquier enemigo que se acerque hasta solo quedar uno, convirtiéndose en múltiples ocasiones el momento más curioso y divertido de la partida. Nunca sabremos por donde nos vienen los golpes.

Respecto al sistema de combate es sin duda de lo más refrescante y variado en el género. Contaremos con una barra de energía para nuestros ataques, según el arma que utilicemos, ya sea más pesada como un martillo de dos manos o más ligera como una daga, nuestra energía descenderá más rápidamente o menos. Depende de nosotros saber emplearla bien, pues una vez agotada bien tendremos que intentar esquivar los ataques enemigos o salir corriendo para no ser pasto de los zombies. Los movimientos y ataques son también muy variados, podremos atacar cuerpo a cuerpo, a distancia e incluso dar épicas patadas a lo Chuck Norris o hacer ataques aéreos. Nadie se lo esperará.

Conclusión.

Dying Light: Bad Blood es sin lugar a dudas el Battle Royale definitivo para todos aquellos fans de los survival-horror, con gran cantidad de acción, explosiones y demás que nos mantendrán en constante adrenalina durante cada partida. Pese a que al principio puede dar la sensación de ser ‘otro competitivo más’, este posee perfectas cualidades para marcar la diferencia, aunque aún queda mucho por ver.

Como ya os he dicho, el título se encuentra actualmente con acceso anticipado adquiriendo en Steam el Pack Fundadores a un precio de 19,99€, con el cual, Techland recoge las opiniones y comentarios de la comunidad para ir mejorándolo poco a poco hasta que lleguen al resultado buscado y convertirlo en un futuro próximo en un free-to-play tanto para PC como en consolas.

¿Os uniréis a la lucha por la supervivencia?

Estas primeras impresiones han sido realizadas gracias a un código facilitado por la compañía, ¡esperamos que os gusten!


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Por Susanapz

Soy de las que nacieron con una PSX bajo el brazo hace 21 años, hermana de Crash Bandicoot y elegida por la Keyblade. De día, junto a mi guardián Auron, intento salvar Spira y de noche soy una assassin en busca de la libertad.

Un comentario en «[Primeras Impresiones] Dying Light: Bad Blood, más que otro Battle Royale»
  1. Interesante juego del que no sabía su existencia.
    Me gustó mucho Dying light y este nuevo juego a lo Battle Royal tiene buena pintilla, si ahora con la edición Spartan de Assassins Creed Odyssey y la especial de Red dead redemption 2 me llega la pasta jaja le echaré el guante a este también.
    Y por supuesto, estupendo análisis de las primeras impresiones del juego.

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